Pteria sterna (Gould 1851)

Factores de riesgo

La explotación ilegal y la sobrepesca son y han sido los causantes principales de la decadencia de Pteria sterna. Es una especie altamente sensible a la manipulación durante el cultivo (Araya Núñez y Buckle, 1995).

Antecedentes del estado de la especie o de las poblaciones principales

Las poblaciones de Pteria sterna se encuentran disminuidas desde finales de los años 30, cuando fue vedada permanentemente (Saucedo y Monteforte, 1997; Cariño y Monteforte, 1999). Sin embargo, estudios recientes demuestran que sus larvas son abundantes en el plancton de la Bahía de La Paz y que tienen preferencias por cierto tipo de substratos (Monteforte y Aldana, 1994; Monteforte y García Gasca, 1994; Monteforte y Wright, 1994). A pesar de lo anterior, no se ha detectado la presencia de bancos importantes en el área durante los últimos 10 años, sin embargo la existencia de algunos ejemplares indica que la especie no se encuentra extinta (Saucedo y Monteforte, 1997b). Las poblaciones de concha nácar son potencialmente frágiles en la actualidad (cuando existen evidencias de una lenta recuperación), ya que siguen siendo sujetas a una explotación ilegal. Los trabajos de (Monteforte, 1991; Saucedo 1991) ponen en evidencia la factibilidad de repoblamiento de bancos naturales por medio de producción de juveniles en condiciones controladas.
La concha nácar (Pteria sterna) fue sobreexplotada junto con Pinctada mazatlanica. Incluso fue considerada extinta en la región de Baja California Sur en 1939 (Félix Pico, 1996; Cariño y Monteforte, 1999). La explotación de la concha nácar llegó a desarrollarse de manera sostenible, llegando a cosechar alrededor de 500 perlas por año y cerca de 10 millones de ejemplares.

Reclutamiento

La especie se recluta a la pesquería a los 2 años (Wright, 2001).

Se ha demostrado que en condiciones de laboratorio Pteria sterna es capaz de desovar y de adaptarse a las condiciones de repoblamiento (Saucedo y Monteforte, 1997). La concha nácar forma parte de la dieta de numerosos depredadores, entre los que se encuentran peces, equinodermos y gasterópodos (Araya Núñez y Buckle, 1995).
La formación de las perlas es debido a la introducción de un objeto extraño en el periostraco del organismo. Este al sentirlo, comienza a recubrirlo de nácar para suavizarlo y evitar daños (Cariño y Monteforte, 1999).

El Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste (CIBNOR) ha llevado a cabo un programa para el desarrollo de un cultivo intensivo de Pteria sterna. Los principales objetivos han sido la optimización de las técnicas de recolección de juveniles y de repoblamiento de los bancos naturales, así como la producción de semilla en laboratorio (Del Río Portilla et al., 1992; Monteforte, 1994; Monteforte y Aldana, 1994; Monteforte y García Gasca, 1994; Monteforte et al.,1995; Saucedo y Monteforte, 1997).

Tasa de crecimiento

Estos son los parámetros poblacionales calculados para Pteria sterna (Buckle Ramírez et al., 1992; Gaytán Mondragón et al., 1993; Saucedo, 1995; Wright, 2001). Linf = 11.9 cm; Winf = 620 g; K = 0.16; to = -0.13 cm (del modelo de von Bertalanffy); a = 0.000756; b = 2.71 (de la relación peso-longitud); longevidad = 19 años; M = 0.26. De acuerdo a Saucedo y Monteforte (1997) la concha nácar presenta un incremento en longitud de 16.9 mm en un lapso de 6 meses en condiciones de cultivo.

Concha frágil de periostraco lamelado quebradizo de color café que varía de tonos claros a obscuros. Con una proyección auricular en el extremo posterior. Presenta un ala desarrollada en el margen de la charnela. Llega a alcanzar tallas extremas de 15 cm, aunque normalmente oscila alrededor de los 7 cm (Keen, 1971, Skoglund, 1990; Kaiser, 1997; Holguín et al., 2000).

Actual

Ecuador

Aun se le encuentra en las Islas Galapagos.

MEXICO

Desde el Norte del Golfo de California a la parte norte de Perú. Habita aguas someras desde la zona intermareal hasta los 25 m (Sevilla, 1969; Reguero y García Cubas, 1993; Massay et al., 1993; Holguín Quiñones y González Pedraza, 1989; 1994; Holguín Quiñones et al., 2000).

MEXICO / BAJA CALIFORNIA SUR

MEXICO / JALISCO

MEXICO / OAXACA

Historica

MEXICO / BAJA CALIFORNIA SUR / PAZ, LA

Desde el Plioceno (Bernard et al., 1991). La concha nácar Pteria sterna se ha explotado por mas de 400 años. También formaba parte del emporio perlero en las costas de Baja California Sur, gran captador de divisas (Cariño y Cáceres Martínez, 1990; Cariño y Monteforte, 1999). Este cultivo masivo de ostras perleras era considerado de primera calidad en el mundo. La explotación estaba otorgada en concesión a Gastón Vives (Cariño y Monteforte, 1999), sin embargo posteriormente la pesquería se abrió al público. Debido a la extracción masiva de este molusco, sus poblaciones prácticamente se extinguieron en la región. Se llegaron a extraer mas de 10 millones de conchas entre 1910 y 1914, obteniéndose entre 250 y 500 perlas por año (Sevilla, 1969; Cariño y Cáceres Martínez, 1990; Monteforte, 1990; 1991; Félix Pico, 1996; Cariño y Monteforte, 1999). El género ha sido descrito desde el Mioceno (Bernard et al., 1991).

Categoria de edad, tamaño o estadio

Pteria sterna alcanza una talla máxima de casi 8 cm de longitud en condiciones de cultivo. La talla inicial para condiciones de repoblamiento es de 55.4 mm de altura de concha (Saucedo y Monteforte, 1997).

Filtradores

Su distribución es netamente tropical y prefiere aguas poco profundas hasta 25 m de profundidad. Generalmente se le encuentra en fondos lodosos y substratos duros.

Relevancia de la especie

Dada la importancia del comercio de las perlas en el mundo, el cultivo representa un modo artificial de explotación para el recurso así como un medio de repoblamiento de los bancos naturales. El potencial económico que representa este recurso mantiene el interés de algunos sectores, ya que podría ser una alternativa para los pescadores. Sin embargo, la captura ilegal continúa en la actualidad y esto incrementa el riesgo de las poblaciones (Cariño y Monteforte, 1999).

Reproducción

Pteria sterna es una especie dioica (Wright, 2000).