Los oribátidos (Oribatida), antes conocidos como criptostigmados (Cryptostigmata), son un orden de ácaros acariformes del clado Sarcoptiformes.
Los oribátidos son uno de los grupos de artrópodos dominantes en los horizontes orgánicos del suelo donde alcanzan densidades de cientos de miles de individuos por metro cuadrado. Muestras de suelo no degradado pueden proporcionar de 50 a 100 especies de oribátidos. En el suelo promueven el crecimiento de los hongos y las bacterias y contribuyen a formar la microestructura del suelo al añadir sus excrementos.
Los oribátidos tienen cuatro estadios en su desarrollo: larva, tres estadios ninfales y adulto. Se alimentan de una amplia variedad de materiales, como plantas vivas o muertas, hongos, líquenes y carroña; algunos son depredadores, pero ninguno es parásito. Los hábitos alimenticios pueden variar entre los estadios inmaduros y el adulto de la misma especie.
Los oribátidos tienen en general una tasa metabólica baja, desarrollo lento y baja fecundidad; son iteróparos, y los adultos tienen una vida relativamente larga; por ejemplo, en bosques templados, el paso de huevo a adulto oscila entre varios meses y dos años
Los oribátidos son probablemente un grupo parafilético con respecto a Astigmata y deberían dividirse en dos grupos; por ejemplo, Desmonomata parecen ser más cercanos a Astigmata que a los demás oribátidos. La nueva taxonomía de los oribátidos está siendo investigada en la actualidad.[1]
La taxonomía de los oribátidos admitida actualmente hasta nivel se superfamilia es:[2]
Suborden PalaeosomataGrandjean, 1969
Suborden Parhyposomata Balogh & Mahunka, 1979
Suborden EnarthronotaGrandjean, 1947
Suborden MixonomataGrandjean, 1969
Suborden Holosomata Grandjean, 1969
Suborden Brachypylina Hull, 1918
Los oribátidos (Oribatida), antes conocidos como criptostigmados (Cryptostigmata), son un orden de ácaros acariformes del clado Sarcoptiformes.
Los oribátidos son uno de los grupos de artrópodos dominantes en los horizontes orgánicos del suelo donde alcanzan densidades de cientos de miles de individuos por metro cuadrado. Muestras de suelo no degradado pueden proporcionar de 50 a 100 especies de oribátidos. En el suelo promueven el crecimiento de los hongos y las bacterias y contribuyen a formar la microestructura del suelo al añadir sus excrementos.
Los oribátidos tienen cuatro estadios en su desarrollo: larva, tres estadios ninfales y adulto. Se alimentan de una amplia variedad de materiales, como plantas vivas o muertas, hongos, líquenes y carroña; algunos son depredadores, pero ninguno es parásito. Los hábitos alimenticios pueden variar entre los estadios inmaduros y el adulto de la misma especie.
Los oribátidos tienen en general una tasa metabólica baja, desarrollo lento y baja fecundidad; son iteróparos, y los adultos tienen una vida relativamente larga; por ejemplo, en bosques templados, el paso de huevo a adulto oscila entre varios meses y dos años