Los odontaspididos, conocidos también como tiburones de la arena, o tiburones de dientes desiguales, es una familia de elasmobranquios Lamniformes que se encuentran en todo el mundo en aguas templadas y tropicales. Hay cuatro especies en dos géneros.
Los Odontaspididae tienen una segunda aleta dorsal. Crecen hasta 2 metros de largo los adultos. En sus estómagos los científicos han llegado a encontrar un torpedo y un cofre del tesoro.[1] El cuerpo tiende a ser de color pardo con manchas oscuras en el dorso. Estas marcas desaparecen a medida que maduran. Su mandíbula está muy adaptada para empalar a los peces, su principal presa. Sus dientes son largos, estrechos y muy afilados con bordes lisos con una y, en ocasiones, dos cúspides más pequeñas a cada lado.[2]
Estos tiburones sólo desarrollan dos embriones, uno en cada útero. Las crías comen huevos no fertilizados en un proceso llamado oofagia antes de nacer.
Los odontaspididos, conocidos también como tiburones de la arena, o tiburones de dientes desiguales, es una familia de elasmobranquios Lamniformes que se encuentran en todo el mundo en aguas templadas y tropicales. Hay cuatro especies en dos géneros.