Gloeophyllum sepiarium es una especie de hongo de la familia Gloeophyllaceae. El nombre del género viene del griego gloiós = resina, gluten, goma, de aquí el prefijo gleo o gloeo, que significa resinoso, glutinoso, pegajoso, y phyllon = hoja, lámina.[1]
Basidiocarpo anual, sésil a dimitado, coriáceo, de solitario a imbricado, de 20-55 x 20-30 x 8-12 mm; píleo semicircular, convexo, superficie seca, zonada, cuando joven tomentoso, en los especímenes adultos de híspido, escruposo a hirsuto; alterna con zonas glabras, de color café rojizo, grisáceo a casi negro hacia la base, margen de entero a ondulado, delgado, fértil, blanco grisáceo, de aterciopelado a hispido; himenóforo con láminas en arreglo radial de diferentes colores desde café amarillento, café anaranjado a café oscuro, de 12 a 21 láminas por cm, 1-7 mm de profundidad con bordes de ondulados a aserrados y aterciopelados.[2]
Se desarrolla en México, en los estados de Chihuahua, Distrito Federal, Durango, México, Guanajuato, Hidalgo, Morelos, Querétaro, Sonora, Tamaulipas y Veracruz.[2]
Crece sobre oyameles (Abies religiosa).[2]
Se conoce muy poco de la biología y hábitos de los hongos, por eso la mayoría de ellos no se han evaluado para conocer su estatus de riesgo (Norma Oficial Mexicana 059).
Gloeophyllum sepiarium es una especie de hongo de la familia Gloeophyllaceae. El nombre del género viene del griego gloiós = resina, gluten, goma, de aquí el prefijo gleo o gloeo, que significa resinoso, glutinoso, pegajoso, y phyllon = hoja, lámina.